sobre un caballo cadriculado
me trajo una rosa.
Todo en él era nefasto (olor a campo)
Lo miré a los ojos/mastiqué despacio.
No me gustan las rosas
menos si son rosas
Prefiero patalear
en un guiso de mondongo crudo
y toser toda la vida ese orgasmo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario